html> Resistencia Civil: Algo para el pueblo... Julio Borges busca el rumbo a la prosperidad

La botácora oficial de Resistencia Civil se encuentra ahora en rcivil.blogsome.com. Por favor, visítanos en esa dirección.

martes, septiembre 20, 2005

Algo para el pueblo... Julio Borges busca el rumbo a la prosperidad


Cuando los ciudadanos temen al gobierno tenemos dictadura; cuando el gobierno teme a los ciudadanos, tenemos libertad.

Thomas Jefferson


En busca del verdadero camino hacia la prosperidad del pueblo venezolano, que necesariamente empieza en la transferencia de los activos mercantiles y rentas patrimoniales del Estado a la población, el candidato presidencial del partido Primero Justicia, Julio Borges, propone la transferencia del 25% del ingreso fiscal petrolero a la población. ¡Bienvenido sea!

El Programa integral para la transferencia completa de activos mercantiles y rentas patrimoniales, del Estado a la población, lo tenemos los liberales hace ya tiempo. Y el Proyecto de Ley para la parte del camino en que parece estar pensando el candidato se desarrolló ya en Aragua.

No es nueva la idea. Décadas atrás Monaldi inició una discusión, en la que destacan los libros y esfuerzos divulgativos de José Luis Cordeiro, y algún otro economista, como el trabajo de Pedro Elías Hernández y la gente de PETRÓLEO PARA EL PUEBLO, así como la temprana participación de quienes hoy formamos Resistencia Civil.

Y con Borges dice uno... ¡Buena iniciativa! Hacen falta más políticos que asuman esas ideas. Lamento no poder decir lo mismo de otros dirigentes de ese mismo partido. Pero no acostumbro ahondar en asuntos internos ajenos.

El Movimiento Liberal Libertario Resistencia Civil, saluda tal iniciativa en un candidato presidencial. ¡Ya era hora!

Dice Borges que el empobrecimiento nos transformó en una sociedad de siervos temerosos ante el Señor gobierno. Pues la mortadela en la mesa, de la buena voluntad misionera del señor gobierno depende. Y que para no pasar hambre la mayoría terminará por agachar la cabeza. Para que todos puedan levantarla, propone transferir el 25% del ingreso fiscal petrolero a la población de forma directa. Y ciertamente por ahí van los tiros.

Hay que confiar en la sabiduría de la gente común para transferirles recursos que son capaces de administrar. Sin que venga algún pendejo, que ni los suyos administra, a pretender “enseñarles” como. Ese tipo de cucarachas cerebrales de cierta parte de nuestra clase media estatista no gustan al candidato. Coincido también en la necesidad de fumigar tales cerebros.

Con el diagnóstico estoy de acuerdo... 100 % de acuerdo. Soy liberal, como todos y cada uno de los resistentes. ¿Cómo podría diferir del diagnostico? Pero por el 100% empiezan las diferencias de forma y de grado... no de fondo en principio.

Pregunto yo: ¿Por qué únicamente se transferiría al pueblo, un 25% de la renta petrolera? Petróleo que admiten unos y otros estatistas “apoderados” del mismo: ¡Que es del pueblo!. Mejor transferir el 100% de la regalía incrementada. Para librarnos de las cadenas de la servidumbre socialista misionera se necesitan más de 170 mil bolívares mensuales... con el barril en los precios actuales.

Es poquísimo, si se considera que la industria petrolera -también “del pueblo”- seguiría 100% en manos del Estado. Cosa mala pues la revolución petrolera es la cuarta república... a la quinta potencia. Uso de la estatal petrolera como caja de gasto. Un gasto que, por ahora, llega más a los pobres. Pero el proceso de cambio revolucionario supuestamente es: ¡Todo el poder para el pueblo! No es: ¡Limosna para todo el pobre! Todo el poder para el pueblo se puede... no con el socialismo. El socialismo es la concentración del poder y la riqueza en el Estado... no en el pueblo. Se puede, por la vía contraria, la del capitalismo popular, asumir el proceso de transferir todo el poder para el pueblo hasta sus últimas y saludables consecuencias. Por ahí va la solución.

Desinformado, tonto -o interesadamente vivo- quien ignora que la industria petrolera privada aportaba al fisco el doble que la PDVSA gubernamental. Las transnacionales pagaban en impuestos y regalía más del 50% de la factura... PDVSA logró reducir su aporte al Estado propietario hasta el 23%. Así las cosas. No solo hay que transferir a la gente el 100% de una regalía petrolera... muy incrementada. Hay que traspasar el 50% de las acciones de PDVSA a la población. Entregando gratuitamente a cada Venezolano su acción de PDVSA en plena propiedad. Eso es realmente: ¡Todo el poder al pueblo! Se debe transferir al pueblo directamente el mayor capital mercantil, y la principal renta patrimonial del actual Estado. El otro 50% de las acciones, habría que subastarlo y usar lo recaudado ¡exclusivamente en liquidar deuda externa e interna! Que ayer y hoy se rumbean los gobernantes y paga el pueblo con inflación y empobrecimiento.

Acciones producen dividendos que cada cual sabrá mejor en que necesitará gastar y en que no... y tiene derecho cada cual de equivocarse y aprender de sus propios errores. O se pueden vender, y con eso disponer de capital para invertir en lo que necesite o prefiera. Eso, y no otra cosa, es libertad. Lo que hay que transferir al libre albedrío de sus nuevos dueños, es la totalidad del capital que representa el 50% del patrimonio accionario del sector petrolero estatal... y otros activos mercantiles, que mal administran burócratas disfrazados de gerentes... hoy como ayer. Lo primero que se puede esperar de los accionistas de verdad, serán gerentes de verdad... negocios de verdad... y ganancias de verdad. Incluso en impuestos para un Estado significativamente reducido.

Y como entre los desastres de gasto y corrupción, más escandalosos del socialismo de cuarta y quinta, están los intentos de proveer servicios médicos y educativos gubernamentales para una población que no tiene con que pagar los privados. Y así como alguna vez estuvieron mejor los hospitales públicos que hoy. Las misiones son la mejor respuesta del socialismo de quinta para amplios sectores de población que había dejado el de cuarta abandonados. Pero la verdad es que nada de eso soluciona el fondo del problema. La renta se puede usar para sustituir eso, de ayer y hoy, por un sistema de subsidio universal directo a la demanda de servicios médicos y educativos competitivos y de calidad... E incluso un sistema básico de pensiones en cuentas individuales privadas competitivas. No es poca cosa lo que se logra con un pequeño sacrificio. Pequeño sí se da plena propiedad privada a la misma población un capital que equivale a varios años completos de tal renta. Con ese sacrificio se estaría sustituyendo definitivamente el discriminatorio e insuficiente sistema socialista de servicios médicos y educativos. Y ahorrando muchísimo en gasto público.

Malo fue que dirigentes del partido de Borges hablaran de transferir, a unos sí y a otros no. Primero porque el costo de excluir unos pocos es más de lo que se ahorraría. Matemáticamente ganan los burócratas y pierde el pueblo. Más importante: Si es para eliminar la servidumbre ante el Señor poder gubernamental, que quita y pone mortadela de la mesa. ¿Tendría sentido cambiar uno por otro poder de quita y pon? Los mismos doctos señores hablan de acumular los reales en un fondo, para empezar a entregarlos tres años después. ¿Por qué acumular lo ajeno dónde pudiera cualquier gobierno de turno despalillarlo a capricho? Esas botijas “estabilizadoras” fueron despalilladas siempre. Unas raspadas groseramente. Otras más finamente... los vivos se ocuparon “invirtiéndolas”. Seriedad en eso. Hay que transferir todo lo que corresponda mensualmente en cuentas individuales. El precio del petróleo sube y baja, cierto. Pero la gente que sabe administrar sus propios recursos y adaptarse a tener hoy más y mañana menos. Es obvio que sabe ahorrar. Cada cual sabrá como, cuando y cuanto ahorra o gasta. No sólo con sus acciones y dividendos. Incluso en el sistema “social” de subsidio a la demanda especifica que proponemos, hay amplio espacio para que cada cual decida de quien, como y cuando adquiere esos servicios de salud, educación y pensión privada. Porque de la libertad de decidir, y cambiar por el camino, es que sale la competencia y la buena calidad de los servicios. Pero por caridad con nuestras propias miserias!!! ¡No pongan zamuros a cuidar carne! Pues eso, y no otra cosa, es el embotijamiento en los tales megafondos estabilizadores estatistas. Cuyos tristes destinos tan bien conocemos todos en esta tierra... por más de una triste experiencia. Lo de Borges no está nada mal para empezar... pero es solo el principio.

Comentarios:
Publicar un comentario


<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't y
ours?